Como me recuerda mi época de estudiante, cuando hacia auto stop. En más de una ocasión tuve alguna esperiencia. Algunos intentaban cobrarse el viaje con alguna mamada, yo si me gustaba, aceptaba. Pero recuerdo en especial a un camionero que hacia Junquera a Lyon. Aquel tío no se conformó con la mamada. Cuando quise darne cuenta, tenia el pantalón bajado y su trabuco apuntando a mi ojete, a mis 23 años, era la primera vez que me follaba un macho de 38 años, según me dijo. Tenia un cipote grueso y fuerte que me introdujo sin demasiada delicadeza, me folló fuerte, salvajemente y se corrió dentro de mí, sin darme ninguna opción de disfrute. Después de asegurarme lo necesitado que estaba, me ofreció darme mucho placer si aceptaba ser penetrado ,nuevamente, más tarde. Antes de llegar a destino acepté y verdaderamente me hizo disfrutar como nunca habia imaginado. Después hablamos, me dijo que era argelino y me dió su teléfono... Le llamé insistente durante días y dejé pasar tiempo para volver a llamarle, pero nunca descolgó.
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Como me recuerda mi época de estudiante, cuando hacia auto stop. En más de una ocasión tuve alguna esperiencia. Algunos intentaban cobrarse el viaje con alguna mamada, yo si me gustaba, aceptaba. Pero recuerdo en especial a un camionero que hacia Junquera a Lyon. Aquel tío no se conformó con la mamada. Cuando quise darne cuenta, tenia el pantalón bajado y su trabuco apuntando a mi ojete, a mis 23 años, era la primera vez que me follaba un macho de 38 años, según me dijo. Tenia un cipote grueso y fuerte que me introdujo sin demasiada delicadeza, me folló fuerte, salvajemente y se corrió dentro de mí, sin darme ninguna opción de disfrute. Después de asegurarme lo necesitado que estaba, me ofreció darme mucho placer si aceptaba ser penetrado ,nuevamente, más tarde. Antes de llegar a destino acepté y verdaderamente me hizo disfrutar como nunca habia imaginado. Después hablamos, me dijo que era argelino y me dió su teléfono... Le llamé insistente durante días y dejé pasar tiempo para volver a llamarle, pero nunca descolgó.
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